Domingo, 10, Nov, 12:15 PM

Fuente: www.pichilemunews.cl – 31.07.2024
- El actual alcalde Cristian Pozo (PS) va por lista oficialista; el actual concejal Tobías Acuña (que fue como independiente/UDI) ahora en la lista de la oposición; y dos independientes: el ex PS y exalcalde Roberto Córdova y el periodista y excandidato a alcalde Jorge Urzúa son los candidatos.

No obstante, a estos cuatro candidatos -si el TER sentencia a Córdova- en acusación que busca “bajar su postulación”, por hechos sucedidos el año 2021 en favor de “su delfín” al que le hizo fiesta, añuñucos, “nanay”, propaganda, se fotografió con él, etcétera, etcétera, entre otras acciones proselitistas.
Luego de todo eso, firmó decreto que dejó libre de polvo y paja a Pozo en Investigación por acusaciones de acoso laboral y otras, para seguir en campaña y que, con el apoyo de Córdova y compañía -léase a sus adherentes- lo sacó de alcalde.
Pero en el transcurso del camino a esa sociedad de hecho -entre el exalcalde Córdova y alcalde Pozo- algo sucedió a poco de andar y todo indica que las promesas de fidelidad quedaron muy luego en la arena política. Y el fragor de las desavenencias -cuyos detalles naturalmente no los conocemos- pero son fácil de adivinar.
El mullido sillón alcaldicio le quedó gustando a los dos y por cierto, el sueldo del cargo no se gana en otro lado de esa magnitud. Y al cobrar cuentas, quedó claro que Pozo no se iría del cargo sin intentar al menos otro período y, cuando ello quedó en evidencia, se devolvieron promesas, rompieron las fotos en que lucían radiantes, contentos. Y, por otro lado, más de alguna desavenencia ocurrió con los macucos de arriba y Córdova -el otrora disciplinado militante que tuvo que apoyar, en su momento, y posponer sus legítimas aspiraciones para apoyar al corrupto que estaba en el poder- ahora sabiendo que igual tiene su equipo y soldados dispuestos a ir a una batalla por la alcaldía, renunció al Partido Socialista.
Y así fue, que lidiando con el proceso que le puede dejar -en días próximos fuera de carrera- igual se las arregló y juntó a quienes firmaron el patrocinio para ir como candidato a alcalde en calidad de independiente.
Ahora, si bien respira por estar inscrito dentro del plazo que determina el sistema electoral, su candidatura depende de la determinación que se conocerá próximamente.
Fuerzas desconocidas -por cierto- deben estar tras ambas opciones: para que sea declarado culpable y que lo deje afuera del proceso eleccionario, o quienes abogarán para que siga adelante.
En la hipótesis que, finalmente, vayan ambos candidatos “progresistas” ¿qué pasará? ¿Para que lado se irán los votos o se dividirán?
Y en el caso que Córdova se quedé abajo, sus votos a quién favorecerán, ¿a Pozo?, o ¿se dispersarán e irán a parar unos pocos al candidato Acuña de la oposición y vinculado a la Fundación ProCultura, o al único candidato local que quedaría, el periodista Jorge Urzúa en su segundo intento?
Incierto -sin duda- el panorama para quienes -independiente del lado que vaya- buscan un alcalde que tenga carácter, liderazgo, visión de futuro y pantalones para detener y demoler construcciones en el borde costero, aparte de luchar por concretar necesidades históricas que -aparte de promesas- no resuelven problemas en salud y otras áreas ….

Fotografías: Archivos “Pichilemunews”/RR.SS.