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Fuente: www.pichilemunews.cl – Por: Manuel R. Pacheco Vargas – 26.08.2024
El reciente jueves 22/08, tuvimos la oportunidad de ser testigos de la llegada e instalación de una nueva e interesante pieza para el amplio y refaccionado Museo Colchagua, ya que recibió mediante una donación de un amigo y amante de lo significativo, un Piano de Cola, de larga, entretenida e histórica vida, que se encuentra en perfectas condiciones de conservación pese a sus 152 años desde su fabricación en Alemania, ciudad de Dresde capital del estado de Sajonia, por la prestigiosa casa Ernst Raps-C. Kirsinger, fabricante de pianos de alta calidad y cuyo representante exclusivo en Sudamérica era para Chile y Perú.
Fue fabricado el año 1872 y vendido a una familia en Lima. Posteriormente trasladado a Santiago de Chile, el que fue luego fue adquirido por una persona que lo mantenía en Buin y quiso donarlo para un fin superior, como es la exhibición en un museo, donde miles de personas por un largo tiempo, podrán disfrutar al observar este valioso instrumento que aporta como hecho histórico al patrimonio cultural. Está en tan buenas condiciones, que incluso fue afinado antes de su traslado a la ciudad de Santa Cruz.
Fue recibido personal mente por Don Carlos Cardoen C. y su señora Pilar Jorquera, quienes expresaron el agradecimiento por la donación e instaron a visitar el museo que está por cumplir 30 años de vida y los sorprende en un interesante momento de crecimiento y consolidación como el mejor Museo privado de Latinoamérica. Es más; destacó, la característica que lo diferencia de los demás, tiene una variedad temática de 10, lo que hace diferenciar de todos sus pares, ya que en su gran mayoría son monotemáticos.
Con esta nueva incorporación que complementa la Sala Ambientada en el Siglo XIX junto a otros pianos de larga historia familiar de sus dueños. También se mencionó el interés en el concepto, que el Museo de Colchagua ya no se mencione más como de la Familia Cardoen, sino como patrimonio y propiedad de todos los Colchagüinos con el fin de preservarlo al futuro.
Decir que esta donación fue concretada gracias a la gestión de Don Juan Carlos Toledo Cornejo, empresario santacruzano, quien actúo de gestor -intermediario entre el dueño y el museo, ambos amigos muy cercanos, que de interés mutuo aceptaron las condiciones de esta donación, de tal forma que se encuentra desde este momento para que lo disfrute la comunidad. Destacando que un inicio pequeño esta idea, ahora se está transformando en un ícono turístico de la zona gracias al esfuerzo personal y colaboraciones como estas que permiten ir creciendo con múltiples donaciones y entregando beneficios socioculturales de primera clase para la ciudad y la región.
La sencilla pero trascendente ceremonia, terminó con la presencia del administrador del museo Señor Marcelo Santander y el tradicional brindis con el espumante Kultrún de la Viña Santa Cruz, ante los medios locales, representantes de la revista “GENTES” y transmisión en vivo de HDN.
“Raíces de un pueblo, son la firmeza que tiene un ciudadano para vencer las adversidades”.

Fotografías: MRPV