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Fuente: El Rancagüino online – Por: Patricio Miranda Humeres 14.02.2022
- El 17 de febrero se abre la recepción de ofertas para los prestadores del servicio. Las condiciones establecen, entre otras, que deberán ser buses nuevos, no reformados, y que el operador deberá crear una aplicación con información en tiempo real de la ubicación de los vehículos, además de implementar un sistema de cobro electrónico.

Fue a mediados de diciembre que el Ministerio de Transportes anunció la licitación de dos corredores eléctricos para Rancagua. En aquella oportunidad, según precisó la ministra Gloria Hutt, las bases habían sido ingresadas a Contraloría para su toma de razón.
El ente fiscalizador dio el visto bueno a fines de ese mes y el proceso hoy está en marcha. El 17 de febrero se abrirá la recepción de ofertas y, según información de la División de Transporte Público Regional, la suscripción del contrato será el 6 de mayo.
La secretaria de Estado ya había adelantado algunas de las características de los servicios, como que serán 20 máquinas de alto estándar, con wi-fi, aire acondicionado y sistemas de monitoreo por GPS que permitirán conocer la ubicación en tiempo real de los buses. Una revisión de las bases evidencia, además, otras condiciones que establece el concurso. Entre ellas, se exige que los buses deben ser nuevos, no reformados, de un solo piso y de una longitud de entre 8 a 11 metros, tampoco podrán ser buses articulados u “oruga”. Junto con ello, se establece como mínimo que los vehículos contemplen un mínimo de 40 plazas de capacidad y 21 asientos.
Los buses también deberán tener implementado un “sistema de aviso” para cuando se abran y cierren las puertas, que debe comprender tanto luces como sonido. En cuanto a la seguridad, entre los principios que se deben cumplir está la instalación de tres cámaras digitales en cada máquina y un grabador de video digital. Por otra parte, se estableció como mínimo un puerto de carga USB por cada dos asientos para que los pasajeros puedan cargar dispositivos electrónicos y servicio de Wi-Fi a bordo que considere al menos 30 pasajeros conectados de forma simultánea.
El contrato también determina un máximo tarifario de $490 en el pasaje adulto, así como descuentos y exenciones de pago. Así, se establece que para los estudiantes de educación media y enseñanza técnica y superior, la tarifa será de un tercio del pasaje adulto. Con el valor inicial determinado en las bases, el valor alcanzaría los $160.
En el caso de los adultos mayores, se establece una rebaja de 50%, quedando en $240 pesos si se aplica el redondeo que implica el contrato.
En tanto, estudiantes de enseñanza básica y niños y niñas menores de 7 años estarán exentos del pago del pasaje.

Recorridos y electrolineras
El punto de carga de los buses eléctricos estará en un terreno de propiedad de Ferrocarriles del Estado, en la estación de trenes de Rancagua.
En las bases se establece que se podrán ocupar hasta 4 mil metros cuadrados del espacio, pudiendo el operador requerir menos. Con todo, de ocuparse todo el terreno, el valor de arriendo establecido ascendería, en inicio, a casi $3 millones mensuales.
Los servicios, en tanto, serán dos que contemplarán sendos recorridos de ida y vuelta. Uno comenzará en la estación de trenes de Rancagua y llegará hasta la intersección de la avenida San Juan con Escrivá de Balaguer y República. Mientras que el otro tiene como puntos de origen y destino la calle Samuel Román Rojas con avenida Viña del Mar, en Rancagua, y la avenida San Juan, a la altura del paradero de la Villa Lo Castillo, en Machalí.
En este sentido, el sistema GPS que deberán tener integrados los buses se ocupará también para entregar información a los usuarios para poder planificar los viajes y conocer los tiempos de espera en los paraderos. Para ello, el operador de los buses deberá crear una aplicación, similar a la que existe en Santiago, donde se puede revisar en tiempo real la ubicación de las máquinas.

Fotografías: Marco Lara/El Rancagüino