Fuente: www.pichilemunews.cl – Por: Antonio Saldías G. - 30.08.2020
La obra del profesional Roberto Montandón Paillard, entre ellas, su calidad de fotógrafo de paisaje urbano, ha sido destacada por el Consejo de Monumentos Nacionales con fondos aportados por la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), en primer libro editado el 2012. Y, recientemente con un segundo libro, donde igualmente se da cuenta de la diversidad y calidad del patrimonio cultural del país a través de la mirada de uno de los más importantes fotógrafos de Chile.
Aún nos queda Mes de la Fotografía, y para todos a quienes nos gusta el soporte ha sido un festín. Muchos archivos y colecciones particulares han compartidos esos instantes capturados para la eternidad. Quienes tenemos puesto el foco en el terruño costino nos hemos prodigado con verdaderas revelaciones, muchas absolutamente desconocidas y otras que intuíamos, fueron visibilizadas por la gentileza infinita de sus conservadores: Archivo fotográfico de UDP, Museo Histórico Nacional, Biblioteca Nacional Digital, Monumentos Históricos Nacionales, …etcétera.
A algunos de los autores les seguía sus pasos infructuosamente desde hace más de tres décadas y este mes hicimos bingo. Interesa poner en valor sus obras, mirar nuestra identidad restrospectivamente y para hoy, insistir en la tremenda importancia de un grande. Roberto Montandón Paillard, cuya intervención fue decisiva en la consecución de la declaratoria de los Monumentos Históricos y Zona Típica que enorgullecen a Pichilemu; Túnel El Árbol, Caballo (grúa) de Agua de Estación El Lingue, Edificio del ex Casino y Parque Agustín Ross, Zona Típica adyacente del Balneario Ross.
Indudablemente, este patrimonio cultural identitario recibió de esos trascendentales gestos, el impulso que más tarde se ha traducido en su rescate y permanencia como un legado a las generaciones venideras.
En la semblanza de mí amigo Víctor León Vargas, deseo compartir detalles de un proceso costoso y pleno de vicisitudes, quien recordó: “Con don Roberto Montandón recorrimos, Centro Cultural Museo Lircunlauta, ex Pro Museo, todo el ramal San Fernando Pichilemu. Él informó que merecían entonces ser Monumentos Históricos las estaciones de Placilla, Colchagua, Túnel El Árbol, Caballo de Agua de El Lingue. Después, gracias a gestiones de Washington Saldías se declaró MH la Estación de Pichilemu”.
Estación de Pichilemu
Una gestión parecida fue la que tuvimos que realizar para ese proceso. En efecto, a instancias de mi hermano Washington, en ese tiempo dirigente de la Cámara de Turismo de Pichilemu, tomé contacto con Roberto Montandón, Hernán Rodríguez Villegas e Ilonka Csillag. Esa fue la clave para declarar Monumento Histórico Nacional el edificio de ex Estación de Ferrocarriles.
Es más, la redacción del texto de la solicitud y su impresión, a nuestra solicitud, la hizo el mismo Hernán Rodríguez y antes de presentar la carta personalmente se la mostré a Washington, quien estimó que tendría más "peso" si era avalada por un organismo y entonces fue enviada, con un párrafo agregado y la firma y timbre de la Cámara de Turismo. Tras ser recepcionada la solicitud, felizmente ésta fue tratada en reunión del Consejo de Monumentos Nacionales, CMN, y tuvo desde el principio una buena acogida; contestando a la Cámara de Turismo que, aparte de lo enviado, eran necesarios otros antecedentes que en muy breve tiempo fueron despachados devuelta al CMN.
Cabe recordar que, previamente, la Cámara de Turismo de Pichilemu A.G., había logrado la aprobación, el año 1993, de más de 6 millones de pesos para restaurar el edificio del inmueble que, el año 1991, había sufrido un incendio que consumió un gran porcentaje del inmueble. Y, ante el nulo intento de la Empresa de Ferrocarriles del Estado, EFE, por reconstruir el edificio; la Asociación Gremial aprovechando la instancia del Fondart, decidió ir a su rescate para fundar allí la Casa de la Cultura.
Y, el siguiente paso, era lograr la declaratoria de Monumento Nacional para así evitar que EFE pudiera eventualmente vender el recinto y perderse la inversión si, el nuevo dueño, decidía demoler el recinto para construir allí otro tipo de instalaciones y/o construcciones. Estas aprehensiones que pueden ahora sonar como exageradas, eran reales, pues EFE y especialmente sus ejecutivos tenían entre sus instrucciones, desprenderse del máximo de activos para hacer caja. De hecho, pese a que estaban parte de los recursos necesarios para restaurar el recinto quemado de la Estación de Pichilemu, EFE no tenía intenciones de entregar el recinto a la Cámara de Turismo para su restauración.
Tan así, que hubo que desplegarse gestiones a varios niveles, pero sin mayores resultados. Fue la acción a través de la prensa, principalmente, lo que “ablandó” a los ejecutivos a conversar con la Cámara de Turismo. Y finalmente, entregaron el recinto, pero no antes de que el Presidente de la Asociación Gremial firmara un “leonino” Comodato, mediante el cual el inmueble de la Estación se entregó por 5 años, a “cambio de la inversión”; debiéndose entregar al cabo de ese tiempo a EFE.
Pero lo más indignante era que, si EFE tenía un interesado en el recinto, a ésta le bastaba avisar a la Cámara de Turismo con un mes de anticipación para la entrega, sin que mediara indemnización de por medio por los recursos allí invertidos.
Felizmente eso no ocurrió, pero eso prueba en forma fehaciente que, las aprehensiones y decisión de solicitar la declaratoria de monumento nacional, en el caso de venta del inmueble, impedirían su destrucción al tener la calidad de tal. Lo que finalmente se logró en tiempo record ...
Esto, es parte de la historia chica y “entre telones” que hubo en estas gestiones.
Restauración
El edificio de la exEstación de Ferrocarriles de Pichilemu fue declarado MHN el 16 de marzo de 1994. Y fue restaurado por un equipo de trabajadores pichileminos, hermanos Rojas Cartalán, entre otros, bajo la mirada del dirigente Washington Saldías en su calidad de ejecutante responsable del proyecto presentado al Fondart, año 1993.
No fue una tarea fácil, pues ante la negativa inicial de EFE, dos tercios del monto fueron entregados tras una serie de gestiones adicionales donde hay que destacar el apoyo de la Directora Nacional de la DIBAN y Presidenta del CMN, Marta Cruz-Coke Madrid, de Nivia Palma del Fondart y del Director Regional de Cultura, el pichilemino Héctor Henríquez Tobar.
Hoy, el recinto de la ex Estación sirve como sede de un interesante Museo de Sitio que recibe miles de visitantes y como Oficina de Servicios Turísticos, cuya dueña, la técnico en Turismo Mónica Cornejo está a cargo, como de su administración y conservación.
Sin embargo, gran parte de las acciones escritas, en lo que dice relación con la declaratoria de monumento histórico, es gracias a la entusiasta participación de Roberto Montandón y muchos otros.
Como el punto de partida fue la faceta fotográfica del personaje, compartiremos un par de registros de su retina durante la visita a nuestro balneario.
Para conocer más ampliamente de la figura y obra de Roberto Montandón, ayer en la edición de El Mercurio, en la Revista del Sábado hay un interesante artículo de quien, como se señala ahí, es este arquitecto, fotógrafo, historiador, explorador, entre otros epítetos.
Ficha
Denominación: Estación de Ferrocarriles de Pichilemu
Categoría: Monumentos Históricos
Uso Inmueble: Ferroviaria
Lugar: Región del Libertador Gral. Bernardo O' Higgins / Provincia de Cardenal Caro / Pichilemu
Tipo norma: Decreto Supremo
Número norma: 116_1994
Fecha Declaratoria: 16-mar-1994