Jueves, 25, Abr, 3:24 AM

Estimado
Washington Saldías Gonzalez
Director de PichilemuNews.cl

Como siempre cuando amanece aquí en Berlín, Alemania, mi primera preocupación es consultar, benéficamente, su página electrónica. Hoy día leo que "En su limusina llegó Leonardo Farkas a inaugurar obras en una escuela de La Villa, en Pichilemu".

Su donación alcanzó para nueve recintos nuevos, pagó sus gastos de traslado, el cóctel, dio una suculenta propina que será comentada por años por los garzones, y le compró todas las empanadas, bajándose a último momento de la limusina a punto de retirarse, al vendedor y, seguramente productor de esas empanadas, para que fueran repartidas entre los asistentes a esa inauguración. ¡Hermoso gesto!

Créame Sr. Director que esta noticia es bellísima y me llena de orgullo. El Sr. Farkas es músico y empresario minero, es un hombre que se alejó de Chile y retornó a su patria lleno de entusiasmo por ayudar a la tierra que lo vio nacer. Como músico tiene esa sensibilidad propia del que canta al amor, al paisaje y a los seres queridos. Es decir lo veo lleno de los positivos sentimientos como un sincero realizador social.

Lo que el Sr. Farkas hizo lo debió hacer el Estado, en este caso los políticos de Pichilemu, para eso cobran impuestos y reciben dinero del Gobierno de turno. El Estado se ahorró ese dinero y nadie sabrá para qué y dónde lo empleará o en qué será malgastado o aprovechado positivamente. Este caso se suma a cientos de otros y merece ser pensado y meditar detalladamente en ello.

Cuando uno vive lejos comprende la capacidad de ayudar, y se adueña de uno esa necesidad cuando ve que el Estado se despreocupa de casi todo lo social, sobre todo de la educación, del deporte y la salud. Pero a la vez se advierte la gran capacidad del chileno, y del estado de Chile, de pedir limosna a quien no corresponde. Al Estado es al que hay que presionar para que cumpla con todos los requisitos de elevar la educación del pueblo, además de otros requerimientos sociales.

Sin embargo gracias a estos gestos, como el del Sr. Farkas se logran cumplir algunos pequeños anhelos, que no alcanzan para cubrir todas las necesidades del pueblo que siempre estará carente de algo.

Qué pasa con los comerciantes pichileminos? Nadie de ellos ha tomado la iniciativa, como la del Sr. Farkas de ayudar al progreso de Pichilemu?.
Yo advierto que su diario electrónico es un factor de comunicación en extremo positivo, necesario y ahora casi imprescindible, y sin embargo ningún comerciante se acerca a Ud. para publicitar alguno de sus negocios, ya sea Hotel, restaurante u otros de los que cubren todo Pichilemu, pues nuestro pueblo es solamente un pueblo de avaros comerciantes.

Sino fuera por el mar, que es gratis, y gratis la belleza del entorno pichilemino y que el paisaje a nadie le cobra impuesto por manifestarse, todos los comerciantes se estarían muriendo de hambre pues, con el espíritu avariento que siempre han demostrado usufructuando de tanta bondades del paisaje marítimo, no han creado ninguna otra fuerza de atracción, sea laboral, social o simplemente caritativa hacia nuestro pueblo.

Me detengo aquí, y hago una observación por lo mucho que he viajado y observado por Latinoamérica, Europa y el Medio Oriente: en todos los pueblos del mundo donde el turismo es su sola mantención, donde viven tan solo de él, reina el mismo espíritu de avaricia y despreocupación hacia el entorno inmediato, es decir hacia su pueblo al que nunca ayudan, salvo aquellos pueblos turísticos que tienen sol todo el año, como en España en el pueblo Llanca, en Grecia, Turkía y otros, pueden, porque acumulan mucha riqueza, comprender que deben dar algo para, en este caso que menciono, publicitar en el mundo entero, más y más las bondades de su pueblo, que es su fuente de trabajo. Así, Pichilemu, -lo digo para lavarme las manos-, no es ninguna excepción, tiene los mismos atavismos de avaricias universales, de preocuparse de ellos solos, y nunca del pueblo que los cobija del cual extraen su fortuna o su relativa mantención económica.

Sr. Director que esta carta sea de agradecimiento al Sr. Farkas, para que su ejemplo sea tomado por los comerciantes de Pichilemu como un estímulo, lo mismo para los políticos y hasta para el Sr. Cura, para que se preocupe del Cardenal Caro, para de que miren su página, Pichilemu News, analicen sus proyecciones y valoren sus alcances, lo mismo que a la Radio Entre Olas y la labor de esos pocos pichileminos, que se esmeran para darle relevancia a nuestro pequeño pueblo.

Tendríamos que decir mucho más pues somos observadores interesados sobre cuanto ocurre en Pichilemu, por ello tenemos derecho a opinar. Lo digo porque estoy intentando reunir aportes de todos los pichileminos que vivimos lejos desperdigados por el mundo, para fundar una institución de salud, deportes o educacional, que prestigie a nuestro lejano pueblo. Veré si lo logro. En su momento, Sr. Director, requeriré y pediré su ayuda.

Reciba Ud. mis saludos, mis felicitaciones al Sr. Leonardo Farkas y a esos poquísimos pichileminos que se preocupan por nuestro querido pueblo, y que la caridad del Sr. Farkas sea una advertencia a los políticos y sus extraños mesianismos partidistas, y para que los comerciantes se preocupen y dejen de lado su codicia, usura y avaricia y no ignoren que ellos pasan y Pichilemu se queda donde está, y que ahora este tipo de noticias, como las de PICHILEMU NEWS, llega al mundo entero y los beneficia a todos, para que se atrevan a entregarle algunas líneas publicitarias, para que su página se ilumine más y crezca, pues es lo único que tenemos los que vivimos lejos, y el resto del mundo, que potencialmente, al leerla, puedan conocer de Pichilemu sus bondades, hermosura, ese mar de todos los días con sus benéficas olas y ese deporte que puede reportarles a todos, sobre todo a los comerciantes, más méritos adquisitivos, para que aprendan a ser pichileminos amantes de su tierra, no sólo de su bolsillo, para que valoren, a Ud. por su página, y a Entre Olas por su valiosa comunicación y, ahora, al Sr. Farkas por su desinteresada y ejemplar ayuda.

Reciba Ud. mis saludos, y encarecidas recomendaciones, para que esta carta la publique, enteramente, sin recortes ni censuras lineales.

Desde Berlín, Alemania.
Jorge Aravena Llanca
Hijo Ilustre de Pichilemu.

Sr. Washington Saldías Gonzalez
Director de PichilemuNews

Como siempre vivo atento al contenido divulgatorio de su página que hace posible receptar desde este lejano continente noticias sobre Pichilemu que le dan vida a esta vieja nostalgia.

Por Ud. sé de los 10 años de vida de Entre Olas, la radio de Pichilemu. Y desde esta distancia que separa Alemania de Chile, Berlín de Pichilemu, le ruego le de mis saludos y felicitaciones al Sr. Jorge Nasser Guerra por su encomiable labor dirigiendo esa radio que le da prestigio a nuestro querido pueblo.

Mis saludos para Ud., de este feliz intermediario, entre lo que Ud. notifica y mis necesidades de noticias afectivas sobre Pichilemu.

Jorge Aravena Llanca
Hijo Ilustre de Pichilemu



Estimado señor Jorge Nasser Guerra.
Director de la Radio ENTRE OLAS de Pichilemu.

Diez años, que parecen nada, cuando, Entre-Olas, han pasado tantas vidas, tantas afanes, triunfos y sacrificios, entonces parecen muchos, por ello es oportuno, por lo tanto, hacerle llegar mis más calurosas falicitaciones por estos 10 años de creatividad en beneficio de Pichilemu.

Desde la distancia, siempre he sabido que la comunicación es un emprendimiento que le ha dado a la humanidad esa capacidad civilizadora que la hace superior a todas las otras especies que habitan este mundo. Ud. amigo Jorge Nasser, ha cumplido con ese precepto de comunicación que a Ud., como persona lo dignifica, y que todos los que estamos emparentados con Pichilemu nos da diarias satisfacciones por lo que le debemos muchos agradecimientos.

Le reitero mis anhelos de prosperidad, además de mis saludos personales a todos sus colaboradores, especialmente a su hermana por su diario sacrificio.

Permítame expresarle nuevamente mi gran cariño por Pichilemu y que a diario pienso, digo o canto desde siempre "QUIERO VOLVER A PICHILEMU", realidad que Ud., con su vos, ENTREOLAS, lo hacen posible desde la distancia.

Reciba un cálido abrazo.

Jorge Aravena Llanca.
Hijo Ilustre de Pichilemu

Estimado Editor

Un agrado saludarlo, le escribo para plantearle mi preocupación por la calidad del aseo y mantenimiento del ornato en Pichilemu.

Voy a Pichilemu durante todo el año y cada verano se hace crítica la limpieza tanto en la ciudad como en las playas cercanas a los centros urbanos (Pichilemu e Infiernillo) y la integridad de las pocas áreas verdes. Cáhuil y Punta de Lobos son la excepción. Hace poco escribí sobre esto mismo a la municipalidad y hago los siguientes planteamientos:

Los Turistas o visitantes:

Para mí hay un problema cultural de los turistas que visitan la zona en lo que respecta a la conservación de la limpieza y propongo que la municipalidad (o la entidad que corresponda) fomente un flujo de información sobre la mantención del aseo. Todo esto acompañado de la disponibilidad de basureros debidamente desocupados a medida que se llenan, Esto es responsabilidad de la Municipalidad.
Cáhuil y Punta de Lobos han logrado un gran avance en esto y pienso que se debe estrictamente a un empeño local. He visto como recogen la basura a medida que se llenan los tachos o recogen los papeles y colillas de cigarros en medio de los visitantes. Es el mejor ejemplo que obliga a un comportamiento urbano adecuado.

Los Pichileminos:

Barrer todos los días la playa al atardecer y el pueblo en la madrugrada es responsabilidad de la Municipalidad. Barrer el frontis de las casas y locales es responsabilidad de cada Pichilemino, si esta responsabilidad no se asume, hay que educar. Tal vez la cámara de comercio pudiera fomentar esta educación.
¿Qué cuesta desmalezar frente a las casas?, ¿Ordenar la tierra frente a las casas?... nada. Además sirve para hacer ejercicio, lo cual es saludable.

Olores:

Asesorar a los conductores de las tradicionales "cabritas" para que realicen un adecuado manejo de las deposiciones de los caballos. Esto evitaría estar comiendo en un restaurante y estar sometido al mal olor de éstas. Obligar a los dueños de locales de comida y restaurantes a incorporar filtros en las campanas de las cocinas, esto evitaría el concentrado olor de múltiples comidas. Solo hay que pasearse por Ortuzar y se huele una mezcla de olores casi insoportable.

Infraestructura o servicios básicos:

En la zona urbana solo hay baños públicos en el Parque Ross, ¡Son dos !
La semana ante pasada en la costanera (frente al Maxi Moto) corría agua servida pestilente por la "vereda" y calle. Por cierto, sería muy bueno que en vez de arena hubiese ahí una vereda, la arena está mezclada con tierra y mugre, no hay evidencias de un aseo en toda esa zona. Es cosa de caminar por el costado del Ex Casino (escalera desde el Parque Ross) y se encuentra solo suciedad.

Hay muchas otras falencias que me apenan, ya que para mi familia Pichilemu es un lugar muy querido y pienso que con una sencilla politica local (desde dentro de los mismos Pichileminos) se podrían solucionar. Esto redundaría en ofrecer un lugar acogedor, dotado de una belleza natural única, manteniendo ese aire de ciudad-pueblo a escala humana que lo hace tan especial.
No se crea que pido y no hago nada, en mi propio entorno, en la casa que tenemos allá, lucho constantemente con este problema, limpiando personalmente y colocando letreros pidiendo cuidado con el aseo.

En mis planteamientos presentados a la Municipalidad, se me ocurrió sugerir el cobro de algún valor o aporte que pudiera financiar la solución de estos problemas, talvez hayan mas personas interesadas en que la presentación de Pichilemu esté de acuerdo a lo que se pretende ofrecer como ciudad turística.

Lamentablemente uno escribe a la Municipalidad y no llegan respuestas, ni siquiera acuso de recibo.

Espero que esto sea tomado en cuenta por alguien que le interese y se traduzca en acciones permanentes en la ciudad.

Atentamente,

Leonardo Ramírez Muñoz
RUT: 9.480.377-2

Sres.
Concejo Municipal de Pichilemu
I. Municipalidad de Pichilemu
Presente

Me dirijo a ustedes con la finalidad de expresarles mi extrañeza al ver que se está cobrando "parquímetro" en el borde costero, sobre todo al verificar el deficiente estado de mantención de la ifraestructura en los accesos a la playa.

Probablemente ustedes tengan la facultad para hacerlo, pero cuando una comuna tiene como entrada importante las actividades relacionadas con el turismo, debe existir más seriedad en las medidas que se toman, y que en este caso van en desmedro de la actividad turística.

Cuando uno tiene un buen producto puede cobrar, pero cuando no es así, sólo se venderá una vez.

Atentamente,

Hernán Martínez Morales
RUT: 8.988.320-2